¿Alguna vez te ha surgido una entrevista que no esperabas? En ese caso, vamos a ver cuáles son las 3 claves para una entrevista improvisada.
Puede pasar que te llamen y te pregunten si puedes ir esa misma mañana o esa misma tarde. Y, si eso ocurre, podemos entrar en pánico porque no llevamos nada preparado.
Voy a recordarte que te he dicho en alguna ocasión (y si no te acuerdas sigue mis redes sociales, que recuerdo muchas cosas importantes) que no esperes a saber que tienes una entrevista para preparártela, sino que inviertas tu tiempo en prepararla bien, aunque no tengas ninguna a la vista.
Pero bueno, si no lo has hecho aún estamos a tiempo de salvar la situación si dejas tus nervios a un lado y te preparas bien lo que te digo a continuación:
- ¿Qué sabes de la empresa?
Esta pregunta te la van a hacer sí o sí, así que, aunque tengas la entrevista dentro de cinco escasos minutos, ve de camino mirando en el móvil todo lo que puedas sobre la empresa.
s un gran error no saber a qué tipo de empresa estás aspirando y, te aseguro que más de uno va sin tener ni idea, aunque tenga tiempo.
Si la entrevista es para un restaurante, te diría que no te mires solo el nombre y el tipo de comida que hacen. Ve a la pestaña “sobre nosotros” o “quienes somos” porque ahí te contarán parte de la historia, y eso suma muchos puntos.
- Tus puntos fuertes y débiles.
Con esto tendrás ya varias preguntas preparadas y te voy a explicar por qué.
Si sabes tus debilidades, podrás responder a “¿cuáles son tus puntos débiles?” y “¿en qué debes mejorar?
Si te sabes tus fortalezas, además de saber responder a la misma pregunta (¿cuáles son puntos fuertes?), podrás contestar a “¿cómo te definirías en tres palabras?” y “¿por qué debería contratarte a ti y no a otra persona?”.
Y ahora voy a matizar sobre esto.
Para que esto te salga bien tienes que preparar muy bien tu DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades).
Si tus puntos fuertes los tienes como “responsabilidad, compañerismo, superación y compromiso” (así con palabras sueltas) no vas a poder aprovechar el truco que te estoy diciendo.
En cambio, si tu DAFO está hecha correctamente y tus puntos los tienes bien explicados, o sea, desarrollados, ya sí que puedes aprovechar este truco. Por ejemplo:
“Como trabajadora, aporto confianza para que deleguen en mí nuevas competencias (responsabilidad). Me gusta mantener buen ambiente con los compañeros para que así el trabajo sea más productivo y las relaciones más cercanas” (compañerismo). ¿Me explico?
De esta manera, si me preguntan por mis puntos fuertes lo diría de la manera que te acabo de exponer y si me preguntan que cómo me describiría diría las palabras sueltas.
Te hago un inciso, como no sabemos si te van a hacer la pregunta “¿por qué debería contratarte a ti y no a otra persona”, debes preparar tus fortalezas de la manera más extensa posible para que así te permitan responder a varias preguntas para no resultar demasiado repetitivo.
¿Estás tomando nota? Si te lías al final te hago un resumen, ¿vale?
Seguimos.
- ¿Cuáles son tus expectativas económicas?
Te pongo esta pregunta porque por experiencia sé que es de las que más cuesta responder y, aunque a mí no me la han hecho nunca, sé que a mis alumnos se la hacen continuamente.
En ese poco rato que estás teniendo, busca en Google el salario medio de un trabajador de ese sector al que estás aspirando. Si encuentras el salario por mes multiplícalo por doce, que queda mejor que hables anualmente.
De todas formas, en esta pregunta (que a mí no me gusta, pero entiendo que quieren ver tu reacción, y desde luego es una pregunta tan incómoda que se puede medir perfectamente la reacción del candidato), es muy importante que no te quedes con una cifra, sino que hables de que todo depende del tipo de trabajo, funciones y de lo que se espera de ti.
Y bueno, ya que la entrevista ha surgido así de manera tan improvisada, con estas tres preguntas y con mucha soltura por tu parte la llevas preparada para salir de ella satisfecho con lo que has hecho.
Hay más preguntas muy importantes, si quieres pincha aquí para que veas cuáles son las diez preguntas más importantes, pero he escogido estas tres porque son las que más pueden ayudarte.
Así que resumiendo:
- Busca información rápidamente sobre la empresa.
- Escribe tus debilidades y fortalezas desarrollando estas últimas para que puedas contestar a otras preguntas. Esto igual te lleva un poquito más de tiempo, pero puedes hacerlo.
- Busca el salario medio del sector de la empresa y añade siempre que todo depende de tus funciones y de lo que se espera de ti.
¡Venga que no es tan difícil! Lo importante es que los nervios no te impidan prepararte lo más mínimo.
Pero recuerda que si eres una persona proactiva (la que se adelanta a todo lo que pueda ocurrir), deberías estar ya preparándote la entrevista, aunque no tengas ninguna a la vista. Si estás buscando trabajo, ¡está claro que te puede surgir en cualquier momento!
Y si, aunque tengas trabajo estás leyendo esto, ojo que también es para ti, ya que es muy buen trabajo personal responder a estas preguntas. Te ayudan en tu autoconocimiento, así que te vendrá muy bien prepararte como mínimo la segunda pregunta tanto de manera personal como profesional.
Ah, antes de irme, algo que te puede ayudar también, comparto contigo otro artículo donde te hablé de las 7 preguntas más difíciles de contestar y te explico cómo podrías hacerlo.
¡Trato de ponértelo todo lo más fácil posible!
Por cierto, este artículo lo tienes también en formato vídeo haciendo clic aquí.
Te deseo lo mejor de lo mejor.
Recuerda seguirme en redes sociales y en mi canal de Youtube. Y, si necesitas que preparemos tu entrevista juntos, contacta conmigo y reserva tu sesión individual.
¡Un abrazo!